4 formas de proteger a trabajadores de COVID-19 (además de pruebas)

Dada su facilidad de contagio, el COVID-19 está cambiando la forma de trabajar en todo el mundo, por eso la adopción de medidas sanitarias y de seguridad al interior de la empresa no pueden tomarse a la ligera. ¿Cómo actuar?

Si bien la aplicación de pruebas es una manera efectiva de impedir la propagación de contagios entre los colaboradores y de garantizar un entorno laboral seguro, no es la única. A continuación te decimos qué más puedes hacer para proteger a las personas del virus y para mitigar los brotes dentro de tu organización.

1. Desarrollar un plan de emergencia

Construir un plan de preparación y respuesta al COVID-19 ayuda a guiar las acciones de protección en la empresa, así que al hacerlo es importante que se considere, tal y como señala la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional:

  • Nivel de riesgo asociado al lugar de trabajo y tareas que se realizan ahí.
  • Dónde, cómo y a cuáles fuentes de SARS-CoV-2 se podría estar expuesto.
  • Factores de riesgo no ocupacionales en el hogar y en ambientes comunitarios.
  • Factores de riesgo individual (edad, presencia de condiciones médicas crónicas y en el sistema inmunológico o embarazo).
  • Controles necesarios para atender los riesgos.
  • Recomendaciones estatales, locales y/o territoriales respecto al desarrollo de planes de contingencia para situaciones que surjan como resultado de los brotes.
  • Pasos para reducir el riesgo de exposición en el lugar de trabajo.

2. Adoptar y promover hábitos de higiene

Hasta las medidas más básicas y simples sirven para frenar la propagación de COVID-19, así que lo mejor será potenciarlas y promoverlas entre todos. Estos consejos que otorga la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ayudan a llevarlo a cabo:

  • Asegurarse de que los lugares de trabajo estén limpios y sean higiénicos:

– Superficies (por ejemplo, escritorios y mesas) y objetos (por ejemplo, teléfonos y teclados) deben limpiarse con desinfectante frecuentemente. De hecho puedes consultar esta guía de limpieza y desinfección en lugares de trabajo elaborada por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).

  • Promover lavado frecuente de manos entre trabajadores, contratistas y clientes:

– Colocar dosificadores de desinfectante de manos en lugares visibles y asegurarse de que se recarguen constantemente.

– Poner carteles que fomenten el lavado de manos.

– Combinar estas medidas con otras de comunicación, como pedir a los responsables de salud y seguridad que ofrezcan orientación, organizar sesiones informativas o facilitar información para promover el lavado de manos.

– Asegurarse de que el personal, contratistas y clientes tengan acceso a lugares donde puedan lavarse las manos con agua y jabón.

  • Promover buena higiene respiratoria:

– Garantizar la disponibilidad de mascarillas y/o pañuelos de papel para aquellos que desarrollen rinorrea o tosan en el trabajo, junto con cubos de basura con tapa para deshacerse higiénicamente de ellos.

3. Acondicionar las instalaciones de la compañía

Cuando los colaboradores deban retornar a sus labores de forma presencial, es clave que la empresa los reciba con espacios de trabajo acondicionados a la nueva realidad provocada por COVID-19. Para ello se necesita modificar este tipo de instalaciones que señalan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC):

  • Aumentar el espacio físico entre los trabajadores y entre trabajadores y clientes (a través de servicios desde auto o barreras físicas como divisores).
  • Colocar carteles, marcas con cinta adhesiva y otras herramientas visuales como calcomanías o cintas de color en el piso, a una distancia de 6 pies, para indicar dónde ponerse cuando no hay barreras físicas disponibles.
  • Cerrar o limitar el acceso a áreas de uso común para evitar reuniones.
  • Elevar los niveles de ventilación.
  • Garantizar que los sistemas de ventilación funcionen correctamente y propicien una calidad de aire aceptable en el interior de acuerdo al nivel de ocupación de cada espacio.
  • Mejorar la filtración central del aire a MERV-13 o el filtro más alto compatible, y sellar los bordes del filtro para evitar las fugas.

4. Implementar medidas al entrar al lugar de trabajo

Adoptar estrictos protocolos de acceso al lugar de trabajo también es imprescindible para detectar a quienes presenten síntomas de COVID-19 a tiempo y regular mejor los procesos de entrada sin poner a nadie en riesgo. Para esto, igual la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sugiere:

  • Someter a trabajadores a un control de temperatura corporal antes de acceder a la empresa y en caso de fiebre (temperatura superior a 37,5°), denegar el acceso.
  • Capacitar a personal médico o de recursos humanos con las instrucciones adecuadas para realizar la toma de temperatura y usar termómetros fiables (incluso existen cámaras que miden temperatura corporal sin contacto para mayor seguridad).
  • Comunicar claramente a los trabajadores que el único motivo de la toma de temperatura es protegerlos de un posible contagio. De hecho, la Dirección de Trabajo en Chile es quien apoya esta medida argumentando que, considerando que el artículo 184 del Código del Trabajo señala que el empleador debe adoptar medidas que protejan la vida y salud de los trabajadores bajo su dependencia, esto debe ser considerado como algo preventivo.
  • Reducir al mínimo el número de entradas a la empresa.
  • No autorizar el paso a personas que no están directamente involucradas en las actividades de la empresa.
  • Solicitar que se respeten políticas de seguridad e higiene interpuestas por la empresa.
  • Implantar un sistema de control de acceso sin contacto para que las personas registren su entrada.
  • Promover el distanciamiento físico y utilizar medidas de separación entre personas.
  • Reducir afluencia de personas escalonando los turnos o las horas de entrada.

No bajes la guardia y mantén protegidos a todos en la empresa

Para combatir la pandemia de COVID-19, no puedes pasar por alto ninguna de las medidas recomendadas y, una vez implementadas, no te olvides de monitorear su cumplimiento. Todo esto ayuda a evitar y minimizar riesgos de contagios, proteger vidas y a identificar acciones correctivas para la mejora continua.

Contáctanos

¿Quieres profundizar más sobre este tema?

Abrir chat
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?