Durante los últimos años Chile ha experimentado un sostenido aumento del parque automotor. De hecho, y según estimaciones de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC), a fines de 2021 en nuestro país circularían cerca de 5,5 millones de vehículos livianos y medianos, incrementándose este número en un 4,1% respecto de 2020. Este dinamismo, está directamente relacionado con la pandemia y el interés que hoy muchos chilenos tienen por movilizarse de forma individual con el fin de proteger su salud.

Ambos fenómenos han llevado al límite de sus capacidades a los estacionamientos de centros comerciales, supermercados, clínicas, y otros espacios públicos y privados, generando diversas dificultades para los usuarios. Largas filas para realizar el pago del parking y atochamientos al ingresar y salir de los recintos, son algunos de los problemas recurrentes en este nuevo contexto. 

No obstante, la transformación digital que vivimos desde fines del siglo XX hoy influye en la mayoría de las actividades que realizamos, incluida la industria de los estacionamientos, donde los nuevos sistemas de pago pueden ayudar considerablemente a mejorar la experiencia del usuario por medio de simples pasos como registrarse en el sitio web del administrador del parking. 

Con este propósito surge el modelo “Free Flow”, un sistema que ofrece máxima comodidad a los clientes, facilitando el flujo continuo de automóviles, lo que a su vez  evita las extensas colas en el tótem de pago gracias a un sistema de cobro 100% flexible. Su operación es sencilla y se realiza a través de la sola lectura de la patente, la que es registrada al ingreso y salida, generando automáticamente el cobro por el tiempo utilizado. 

Su forma de pago es aún más cómoda, permitiendo cancelar la tarifa a través de tres medios. El primero es efectuando el pago en las tradicionales islas ubicadas en los estacionamientos. El segundo y tercer método, en tanto, son absolutamente novedosos, ya que en un caso permite realizar el cargo previa inscripción de una tarjeta de crédito, y en el otro, de forma remota acudiendo al sitio web del administrador e ingresando la patente para luego pagar con tarjeta de débito o crédito. 

En conclusión, los beneficios del sistema “Free Flow” son múltiples, pero pueden sintetizarse en tres pilares: Máxima comodidad para los clientes; fácil integración, ya que puede operar de forma complementaría a los sistemas existentes; y reducción de esfuerzos operativos, permitiendo dedicar estos recursos a la planificación estratégica y atención al cliente. Con esta solución, el rubro de los estacionamientos en Chile estará preparado para la operación del futuro, posicionando a nuestro país como líder en implementación de sistemas altamente tecnológicos, seguros y sustentables.